La Reserva Municipal Playa Bluff es una estrecha franja costera ubicada en la parte norte de la Isla Colón, entre el bosque lluvioso y el Mar Caribe, incluyendo una playa de anidamiento de tortugas marinas.
El área de amortiguamiento está habitada por pobladores indígenas ngobe y afro-caribeños, con una cierta presencia de extranjeros que se han establecido en el área.
Aunque no cuenta aún con un Plan de Manejo, el mismo está en elaboración dependiendo del estudio ecológico rápido elaborado en ocasión del proyecto de afianzamiento de la zona y fortalecimiento de la comunidad aledaña, organizada bajo el nombre Asociación Natural Bocas Carey (ANABOCA) para el co-manejo con el Municipio de Bocas del Toro, quien no cuenta con los recursos para diseñar e implementar una estrategia de conservación y manejo de esta zona tan importante para la conservación de las tortugas marinas que allí anidan.
Su inclusión en el Sistema Nacional de Areas Protegidas (SINAP) de la Autoridad Nacional del Ambiente (ANAM) de Panamá, aún no ha sido formalizada, por lo que depende totalmente de la gestión municipal.
La RMPB presenta una gran diversidad biológica que ha sido caracterizada durante el mencionado estudio. Posee lagunas costeras, dunas de arena, una flora abundante y la presencia de roedores, reptiles, aves e insectos representativos de la región y que conforman parte de la vasta extensión de humedales que se extiende a lo largo de las regiones costeras transfronterizas entre Panamá y Costa Rica.